Como comentábamos anteriormente, muchas personas asociamos los conceptos de vacaciones-bienestar, trabajo-malestar. Sin embargo, hay matices, y verlo de una manera tan dicotómica no nos ayuda a llevarlo mejor, al contrario, nos lo pone más difícil. Te proponemos que trates de pensar en aquellas partes de tu rutina que disfrutas y que son gratificantes para ti. Identifica las razones por las cuales te merece la pena volver a trabajar y a estudiar, ¿qué ganas tú? ¿Qué te aporta esta parte de tu vida?